Confesiones.

Vuelvo a escribirte, avergonzada por todo el tiempo que ha pasado desde la última vez y por lo poco que puedo contar.
Gente nueva y lugares nuevos, pero tan efimeros, que casi no pude disfrutarlos, practicamente no tuve tiempo para coleccionar recuerdos en mi mente, de los cuales tirar en esos momentos de nostagia.
Personas que prometieron volver y que no lo hicieron nunca, parece que todo son decepciones en esta vida perra.

Sonrio con acritud, y pienso en él, hoy le he llamado y ha saltado el contestador, he colgado sin dejar un mensaje.
Una parte de mi, se aferra a la hipotesis de que le pille mientras entrenaba, la otra, menos ilusa sabe que esa no es la verdadera razon.

Sé que no debería haberlo hecho, pero este finde han venido Koldo y Lara y he echado de menos tener a alguien a quien besar y con quien dormir abrazados.

La carne es debil, pero el corazón lo es mucho más, al menos, el mio debe serlo porque últimamente le busco en todos los rincones de Nantes, pero parece que juega al escondite, o se ha ido a Le Mans para huir de mí, y no volver jamás,

Vuelvo a sonreir, esta vez con mucha màs amargura y cinismo, creo que casi me arrepiento de haber venido, creo que me arrepiento de estar aqui, y sobretodo me arrepiento de haber venido aqui por él.
Qué tonta soy.

María me ha pasado un enlace de un blog de una chica que contaba sus encuentros sexuales, me ha gustado bastante, y me he acordado de tí, y lo abandonado que te tengo, y he decidido publicar una entrada.


Mañana toca madrugar y mi cuerpo sólo quiere hivernar toda la primavera, y despertar en otoño, mañana sonará el despertador y me cagaré en todo, pero tendré que salir de la cama y enfrentarme al mundo aunque no me apetezca, aunque sólo quiera dormir.

Me siento rara, fea y diferente, ya ni me reconozco cuando me veo en el espejo y no me cuesta entender porqué los hombres sólo están de paso.
Quizás empiezan a notar ese deje de tristeza que llevo arrastrando, y eso que hago lo posible por que no se note, pero no debo ser muy buena actriz y todos acaban marchandose y yo fingiendo que no me importa estar sola.

Echo de menos a Nico, no era perfecto pero me hacia olvidar a Quentin, e incluso creo que llegué a quererle, sobretodo al final, me gustaba dormir con él, levantarnos juntos y desayunar en su cocina, incluso me entraban escalofrios cuando me cojia la mano, pero eso ya forma parte del pasado y toca encontrar a otro que me haga olvidar a Quentin.

A veces imagino que vuelve un finde a Nantes y me lo encuentro por la calle o en una discoteca, aunque con lo poco que salgo ultimamente dudo que eso ocurra.
Es gracioso, pensar en lo mucho que le odio y que no le puedo dejar de querer.
Deseo que sea infeliz, que se quede solo, que nunca llegue a amar, pues no creo que ninguna le haya querido como lo hice yo.
Y me jode recordar todo lo que me dijo, las palabras de amor que nunca fueron ciertas y que nadie le pidió.
Me imagino que vuelve y esta vez soy yo quien le da la patada, pero no puedo esperar toda la vida para vengarme y voy a tener que aprender a olvidar y pasar página.


...One of these days these boots are wanna walk all over you.